Decididamente, la Villa de Merlo es el mayor y más importante centro turístico de San Luis. ¿Sus puntos fuertes, además del bendecido microclima que lo acoge? Su impactante geografía, paisajes serranos de ensueño, variadas actividades para practicar turismo aventura, diferentes opciones de alojamiento para todos los bolsillos y una exquisita gastronomía. Descubrí todo lo que tenés para hacer.
Como ya se mencionó más arriba, Merlo es famosa mundialmente por su microclima. Cuenta con un cielo límpido y de intenso celeste, libre de contaminación y despejado. Lo que permite por las noches la observación astronómica, donde se dejan ver estrellas y planetas. Así, la villa se fue consolidando como uno de los destinos preferidos del astroturismo. Muchas agencias ofrecen excursiones nocturnas para visitar los principales miradores de la villa serrana.
Además de los puntos altos, también hay observatorios a cielo abierto, en el que grupos especializados cuentan con telescopios móviles. Y el personal capacitado ofrece una charla de divulgación científica entre los visitantes, que dejan muchas enseñanzas.
Circuitos turísticos de Merlo

Enmarcado por un imponente entorno natural, la Villa de Merlo es ideal para la práctica del senderismo. Con diversos grados de dificultad y exigencia, se puede hacer trekking con caminos en medio de una deslumbrante naturaleza, que permiten llegar a cascadas y puntos panorámicos en cerros con unas vistas espectaculares.
Durante los últimos años se han agregado varios kilómetros de bicisendas. Que pueden recorrerse a solas o con salidas guiadas, y se transitan con las clásicas bicicletas de montaña o las más nuevas eléctricas.
Saliendo de la villa y a poca distancia, se pueden visitar hermosos lugares como Carpintería (un pequeño y encantador pueblo con balneario y camping municipal), El Trapiche (otro poblado encantador con buena oferta gastronómica) y el dique Piscu Yaco (con descansos frente al agua y feria de artesanos). Otros puntos clave para conocer son el Algarrobo Abuelo, en Piedra Blanca Abajo, y el Viñedo Fraterno, donde se hace degustación de vinos.
Además, podemos “viajar al pasado” al conocer el pueblo donde habitaban los primeros pobladores, los comechingones. El Parque Temático Yucat recrea la vida de los antiguos moradores del Valle del Conlara.
En el recorrido hacia estos sitios, el visitante puede disfrutar de la avifauna, que cuenta con más de 200 especies, además de la flora, que deslumbra con sus bosques de algarrobo y quebracho, y especies lugareñas, que crecen en la altura, como el tabaquillo.
La gastronomía merlina es exquisita

Las carnes asadas, acompañadas por hierbas aromáticas, son una de las principales propuestas autóctonas y tradicionales. A las que se suman otros menús gourmet, que se maridan con excelentes vinos y cervezas artesanales. Para el postre, las cartas tientan con un sinfín de exquisitos dulces, tortas y otras creaciones.
Un fuerte local es la producción de cerveza artesanal, que cuenta con más de una docena de autores vernáculos. Algunas se encuentran a lo largo de la Avenida del Sol, la arteria central del pueblo, con muchos negocios y tiendas, y otras están desparramadas en las cercanías. A pocos kilómetros es recomendable visitar los viñedos, que tienen como marco natural las inmensas Sierras de Comechingones. Allí se hacen deliciosos vinos orgánicos. Y para terminar, gracias a una indiscutible impronta europea, la pastelería, los chocolates y los alfajores regionales son una tentación para cualquier paladar.